¿Qué se considera un daño ambiental?
La Ley Ambiental del Distrito Federal incorpora el concepto de daño ambiental, definiéndolo de la siguiente forma: «Toda pérdida, disminución, detrimento o menoscabo significativo inferido al ambiente o a uno o más de sus componentes».
¿Cuáles son los daños ocasionados en el ambiente?
El daño ambiental es el accionar humano que afecta la calidad y cantidad de los componentes ambientales, generándose contaminación; y el delito ambiental es todo comportamiento antijurídico, culpable y sancionable punitivamente que atenta contra los bienes ambientales.
¿Qué características posee el daño ambiental?
Soro define el daño ambiental como “cualquier deterioro grave o leve de uno o varios elementos integrantes del medio ambiente, de dominio público o de propiedad privada, producido por cualquier causa, antrópica o no, así como los daños morales sufridos por los particulares y derivados por los anteriores”.
¿Cuáles son los daños medioambientales?
La Ley establece como daños medioambientales aquellos que pueden afectar a las aguas, al suelo, a la ribera del mar y de las rías, a las especies de la flora y la fauna silvestres, así como a los hábitats de todas las especies silvestres autóctonas.
¿Qué significa el daño ambiental?
¿Qué significa esto? En primer lugar debemos distinguir el daño ambiental del daño que se origina a otros bienes jurídicos a través del ambiente, por ejemplo la salud, la vida, o la propiedad. Incluso derechos colectivos como la identidad cultural pueden ser afectados como consecuencia del daño ambiental.
¿Cuál es la responsabilidad objetiva frente al daño ambiental?
En primer lugar, esta disposición es coherente con la posibilidad de admitir la responsabilidad objetiva frente al daño ambiental. En segundo lugar, el daño al ambiente pudiera resultar, a pesar de su existencia, no indemnizable, debido a la inexistencia de un marco legal que garantice dicha reparación.
¿Cuáles son las exigencias medioambientales en España?
La mayoría de exigencias medioambientales están reflejadas en leyes o normativas. En el caso de España, la Ley de Responsabilidad Medioambiental (o Ley 26/2007) tiene como función prevenir, evitar y reparar los daños medioambientales que particulares (ciudadanos o empresas) puedan causar en el entorno.