¿Qué papel jugó la Iglesia Católica en la conquista de las sociedades originarias de América?
La Iglesia católica desde que llegó al continente americano de la mano de los conquistadores y colonizadores europeos, desempeñó tareas vinculadas con el control y vigilancia de la población que aquí habitaba. Esta labor la siguió desempeñando luego de la independencia de las colonias españolas.
¿Cuál era el papel de la Iglesia en la sociedad colonial?
En la colonia la Iglesia católica tuvo una gran importancia, pues esta era la única religión permitida en la América Hispana, por esto estaba encargada de dictar las normas de comportamiento, celebrar las festividades religiosas, y llevar los registros de nacimientos matrimonios y defunciones.
¿Qué significaba la iglesia en la Edad Media?
Allí formaban un grupo muy poderoso cuya capital se hallaba en la ciudad de Córdoba. La Iglesia en la Edad Media tenía mucho poder. Esto se debía a su enorme riqueza, a su clara organización y a us importancia cultural, que se contraponía al desorden, la ignorancia y la violencia de la sociedad feudal.
¿Cuál fue el papel de la iglesia en la política medieval?
En el área de la política, el papel de la iglesia en la cultura medieval también fue destacado. El dominio de la iglesia no se limitaba al país o a una región exclusivamente. Sus representantes ejercían su influencia en cada parte del continente europeo en el que el cristianismo había triunfado.
¿Por qué la iglesia tenía mucho poder en la Edad Media?
Ya hemos contado cómo la Iglesia en la Edad Media tenía mucho poder. El principal motivo lo encontramos en su riqueza, y cómo no, en una clara organización así como en la importancia cultural, y en la influencia sobre la vida social. La iglesia se contraponía al desorden, la ignorancia y la violencia de la sociedad feudal.
¿Cuáles fueron los puntos más importantes de la iglesia en la Edad Media cristiana?
Uno de los puntos más importantes de la actuación de la Iglesia en la Edad Media cristiana fue en el campo de la ciencia. Sin la Iglesia no existiría la belleza de la arquitectura, de la música, del arte sacro, de las universidades, de los castillos, del derecho, de la economía, etc.