Que es el alma divina y el alma animal?

¿Qué es el alma divina y el alma animal?

Esas dos almas, sin embargo, no residen «una junto a la otra» dentro del cuerpo; más bien, el Alma Divina está investida dentro del Alma Animal —así como el Alma Animal está investida dentro del cuerpo. Esto significa que el Alma Animal, también es vitalizada por la «parte de Di-s en lo alto» en su interior.

¿Qué es la esencia divina del alma humana?

Ostensiblemente, las dos almas están en conflicto una con la otra, pero en esencia son compatibles 4. La esencia Divina del alma humana es la que coloca al ser humano por encima y aparte de las otras creaciones, aun los ángeles. El ángel puede ser más espiritual, pero el ser humano es más Divino.

¿Cuál es la esencia del alma del hombre?

Pues la esencia del alma del hombre es «literalmente parte de Di-s en lo alto» 3 —una parte de Di-s en nosotros, por así decir. Los maestros jasídicos hablan de dos almas distintyas que vitalizan al ser humano: un «Alma Animal» y un «Alma Divina».

¿Qué son los cinco nombres del alma?

Los maestros jasídicos explican que los cinco «nombres» del alma realmente describen cinco niveles o dimensiones del alma. Nefesh es el alma como motor de la vida física. Ruaj es el ser emocional y la «personalidad». Neshamá es el ser intelectual. Jaiá es el ser supra-racional —el asiento de la voluntad, el deseo, el compromiso y la fe.

¿Cómo se pueden ver las almas que no han descansado en paz?

Usualmente las almas que no han descansado en paz no se le pueden ver los pies cuando se nos aparecen. Las almas que han descansado en paz aparecen completas. Si ellos han muerto en un accidente o fueron asesinados pueden verse con sus heridas físicas cuando murieron sin importar si han muerto hace 100 años atrás.

¿Por qué los animales tienen alma?

Los animales tienen alma, como las plantas y aun los objetos inanimados; cada brizna de pasto tiene un alma, y cada grano de arena. No sólo la vida, sino también la existencia requiere un alma para sustentarlas —una «chispa de Divinidad» que perpetuamente imbuye su objeto de ser y significado.