Por que crear un personaje?

¿Por qué crear un personaje?

Al crear un personaje, no es necesario que arrastre un trauma desde su infancia para ser interesante. Como en la vida real, lo que importa no es nuestro pasado, sino la manera en que afrontamos el futuro.

¿Qué personaje debe tener en la historia que vas a contar?

Cada personaje debe tener una función en la historia que vas a contar. Considera en qué forma contribuirá con la historia y asígnale un papel básico. No hay problema si lo cambias más adelante, pero es bueno tener una idea. Por ejemplo, el personaje podría ser el héroe, el villano, la mujer fatal, el anciano sabio, el cortejador o el ayudante.

¿Cómo elegir un arquetipo para tu personaje?

Elige un arquetipo que funcione para tu personaje, pero dale rasgos únicos que lo conviertan en uno original. Describe la apariencia física del personaje en una lista o un párrafo. Pregúntate cómo lucirá el personaje. Luego describe sus rasgos físicos básicos, cómo suele vestirse y cómo se mueve y se para.

¿Cómo crear un personaje para una historia?

Tal vez quieras crear un personaje original para una historia, una novela, una historieta u otro proyecto creativo. Crear a un personaje único y real puede ser un gran desafío, pero hay algunas técnicas que te ayudarán en el proceso. Una manera fantástica de crear personajes complejos y bien desarrollados es elaborar una ficha de personaje.

¿Cómo organizar la información para cada personaje?

Debes hacerlo para todos los personajes, independientemente de lo pequeño que sea su papel. La información puede organizarse de muchas formas: Guarda una carpeta de archivo en donde tengas notas para cada personaje.

¿Qué es la complejidad de un personaje?

La complejidad de un personaje no viene dada por una biografía farragosa, sumada a un trauma del pasado y su deseo de ser luchador de sumo. Al crear un personaje, identifica bien su meta y su conflicto, céntrate en ellos y trabaja a partir de ahí. Es una regla vital de escritura.

¿Qué es un personaje plano?

Un personaje plano no es siempre algo malo: lo podemos necesitar para algún secundario o incluso para un protagonista donde procuramos reproducir un estereotipo de nuestro género. Ciertas novelas por ejemplo, piden a gritos a un señor así.